Un caballero puede reclamar para sí un territorio neutral que pasa a ser de su propiedad si no pertenece a otro. O en su defecto atacarlo para intentar conquistarlo. Ojo que puede pertenecer a otro reino y derivar a una guerra Santa.
Cada territorio otorga un bonificador general y particular. Al conquistarlo se debe elegir si el beneficio será para el jugador o para el reino.